Esta semana hacemos una visita a los más pequeños del cole para realizar la tradicional carta a los Reyes Magos. Los pequeños nos reciben con ilusión y asombro. Los catálogos empiezan a circular por la clase, tijeras en mano, comienza la cirugía.
Comienzan a cortar tan rápido que las tijeras no pueden cerrar cuando ya se abren. Quiero esto, quiero lo otro, quiero todo. No conseguimos abarcar todo, nos reímos con tanta energía y tantas ansías de pedir los juguetes.
Los mayores realizamos nuestra tarea escuchando a los pequeños y escribiendo lo que piden. Algunos no paran de decir de carrerilla todo lo que les gustaría tener. Bueno, luego sus majestades seleccionaran lo que les parezca más interesante teniendo en cuenta que los camellos no podrán con todo lo pedido.